Todos los martes nuestros colegiales salen a la calle para repartir sándwiches y bebidas calientes a personas sin hogar. La actividad Bocadillo Solidario organizada por  Pastoral Conjunta en colaboración con Cáritas Madrid para todos los universitarios tiene como objetivo dar comida y compartir tiempo con las personas más necesitadas, las que viven en la calle. A las ocho de la tarde, todos los jóvenes se dan cita en la Iglesia de Las Calatravas, en el centro de Madrid. Allí hacen los bocadillos con las aportaciones que unos y otros han llevado: pan y distintos tipos de embutido. Además, los organizadores siempre llevan termos con café y caldo. En menos de una hora, los jóvenes salen a la calle para localizar a las personas sin hogar que se refugian en los rincones del centro de la capital. Estas fechas son duras por el frío que hace y la vida en la calle es aún más inhóspita. Muchos de los beneficiarios ya conocen a los responsables de la actividad y esperan con ilusión la visita de los jóvenes. Algunos tienen ya confianza y cuentan sus preocupaciones mientras dan las gracias por la comida y la bebida caliente. Este es uno de los objetivos, acompañar y que, al menos el ratillo que pasen con los jóvenes, no se sientan solos. Que vean que los miran a la cara, les sonríen y que sus problemas son importantes. Pero las personas sin hogar no son las únicas que salen beneficiadas con esta actividad. Los jóvenes de nuestro colegio mayor toman conciencia con el gran problema del sinhogarismo y tienen la oportunidad de ayudar y conocer las historias de vida de las personas a las que reparten comida, que “son muy enriquecedoras”, como afirman ellos mismos.

Después de acercarse por grupos a las cuatro zonas en las que dividen el centro de Madrid, y repartir la comida y la bebida, los jóvenes universitarios vuelven a los salones de la parroquia y comparten entre ellos sus experiencias. Desde que comenzara la actividad en octubre, unos 30 colegiales han participado en la actividad, muchos de ellos de forma regular.