Apertura del Curso 2015-2016

0 Comments

“Vuestro futuro será el que hayáis elegido y construido vosotros en estos años preciosos de vuestra juventud”

En estos momentos, al encontrarme delante de tantos jóvenes, son tantas las ideas que quiero transmitir… vosotros jóvenes… sois el futuro de nuestra sociedad…  así que van a permitirme dirigirme a los Colegiales, ya que son la savia de este Colegio Mayor.

Este curso lo hemos iniciado con nuevas iniciativas y entre todos estamos contribuyendo a crear un clima de estudio, de amistad… inmersos en un ambiente de respeto, de participación, de equipo… ¡gracias! Porque sé que juntos estamos y podemos construir el Colegio que soñamos… Os animo a mirar hacia delante… Sumergidos en la sociedad actual, ahora más que nunca sois, somos los jóvenes que debemos afrontar la vida, el futuro con optimismo, con espíritu de lucha, de constancia… y por qué no, iniciar estas actitudes dentro de nuestro ambiente, nuestra familia del Colegio…

“Voy ahora a leeros unas palabras que encontraron en la lápida de un obispo anglicano en la Abadía de Westminster:

Cuando era joven y mi imaginación no tenía límites, soñaba con cambiar el mundo. Según fui haciéndome mayor, pensé que no había modo de cambiar el mundo, así que me propuse un objetivo más modesto e intenté cambiar solo mi país. Pero con el tiempo me pareció también imposible. Cuando llegué a la vejez, me conformé con intentar cambiar a mi familia, a los más cercanos a mí. Pero tampoco conseguí casi nada. Ahora, en mi lecho de muerte, de repente he comprendido una cosa: Si hubiera empezado por intentar cambiarme a mí mismo, tal vez mi familia habría seguido mi ejemplo y habría cambiado, y con su inspiración y aliento quizá habría sido capaz de cambiar mi país y -quien sabe- tal vez incluso hubiera podido cambiar el mundo”.

Colegiales, jóvenes… es el momento de cambiar el mundo, el Colegio, la universidad, nuestros ambientes… comenzando por cambiarnos a nosotros mismos. Cada uno de vosotros sois una pieza clave dentro de esta familia. Y os animo a que os preguntéis: ¿qué puedo regalar cada día a mis compañeros?, ¿estoy ofreciendo a los demás toda la riqueza que tengo dentro de mí? Debéis descubrir las cualidades que tenéis y convertirlas en don para los demás. Sin cada uno de vosotros este Colegio Mayor no sería el mismo. Por eso, me atrevo a deciros que luchéis con constancia por ser una persona que pueda dar respuesta a las necesidades de nuestra sociedad.

San Juan Pablo II, decía dirigiéndose a los jóvenes: “Elegid lo bueno, lo bello, lo mejor”. Es ahora el momento de escoger el camino del bien, de la honradez, de la generosidad, de la solidaridad, de la responsabilidad, de compartir y descubrir que el individualismo empobrece, de dar al que no tiene, dar lo que tenemos, que puede ser una palabra, una mirada de comprensión… momento de sonreír en un mundo de pesimismo, de escoger el reto antes que el desánimo, de aprender de los demás, de pararse a pensar, con visión crítica y constructiva, es momento de soñar, soñar con grandes metas…

Ahora me gustaría que pensarais en el privilegio que tenéis por el hecho de poder estudiar, formaros, convivir con tantos jóvenes… ¡es una gran oportunidad!, ¿sois conscientes de todo lo que recibís?

Estos años se podrían convertir en una escuela de formación.  Convivir con tantas personas puede ser motivo de problemas o de ventajas, de riqueza… depende de cada uno de vosotros. En estos años debéis formar amistades fuertes, que merezcan la pena. Que entre vosotros haya una relación de ayuda mutua, de estímulo, de apoyo, de confianza, de espíritu de superación, que os exijáis, os comprendáis, que aprendáis unos de otros, valorando siempre lo positivo que puedo recibir de los demás, más que lo negativo… haced equipo… un equipo donde no tenga cabida la rivalidad, sino la sensación de unidad, de que juntos… podemos más… y somos más… el ser humano… es social por naturaleza… ¿Por qué no aprovechamos este curso para crear lazos de amistad? ¿Por qué no construir en nosotros valores humanos que nos embellecerán como personas? Estas actitudes, serán una gran aportación para nuestro Colegio, para vuestra universidad, para nuestra sociedad…

Mirad a vuestro alrededor, solo hace falta estar un poco atento… Pensad en la universidad… Seguro que recordáis, ese compañero que está atento en clase, que ayuda a todo a aquel que lo necesita, que se planifica y organiza, que cada cuatrimestre procura aprobar todo con esfuerzo y además tiene tiempo para divertirse… ¿queréis ser esos buenos amigos para los demás? Una vez me dijeron una frase que a lo largo de mi vida, he podido comprobar que es real: “Sé buen amigo y tendrás buenos amigos”. Pues… os lo digo a vosotros: sed, esos buenos amigos que querrías tener, y no os faltarán amigos de verdad.

Muchos de vosotros llegáis aquí ilusionados dispuestos a estudiar aquello que os gusta, con ganas de hacer amigos, de participar en las actividades, queréis aportar todo lo mejor de vosotros mismos… ¡Claro que sí!, no arrinconéis esos ideales tan nobles, sed constantes… Os ánimo a que explotéis todas esas energías con las que llegáis al Colegio Mayor. Ponedlas al servicio de los demás, cada uno de vosotros, sin excepción, tenéis tanto que ofrecer…

He hablado de constancia, y es que no siempre es fácil conservar estos grandes ideales… pero… también os digo… es propio del joven la superación… las metas… y como dice una frase que siempre me ha ayudado: “no es más feliz el que hace lo que quiere, sino el que quiere lo que hace”. Tener claro el objetivo, la meta que perseguís de formaros en todos los ámbitos de vuestra personalidad… requerirá esfuerzo… pero seréis felices si lucháis por lo que queréis, disfrutaréis de una felicidad y de una satisfacción que no tendrías si vuestro objetivo fuera únicamente como se suele decir: “hacer lo que me apetezca” . Así que… como leí una vez… “si tienes clara tu meta… No temas lanzarte hacia ella”.

Vuestro primer objetivo tiene que ser el estudio serio y responsable de una carrera universitaria. Algunos este año acabaréis, otros estáis a mitad de camino… vivid con intensidad estos años… que serán los cimientos de vuestra profesión, de vuestro futuro y del de muchos… Por eso debéis plantearos metas de mejora en vuestra organización del tiempo, en vuestro aprovechamiento de las clases, en vuestras relaciones de amistad, en vuestras estrategias de estudio… y es que “quien tiene un presente comprometido, tiene un futuro rico”

Pero hay muchas personas que están contribuyendo a  que todo esto se vaya haciendo realidad…

Por eso, no quiero dejar de agradecer a nuestro capellán Don Pedro, que con gran empeño, cercanía, alegría, diálogo, espíritu juvenil… nos está acompañando este curso. Gracias, porque sabemos que estás ahí, que contamos con una persona abierta a todos y disponible a las necesidades del Colegio y consideramos que dentro de la educación integral de un joven, se encuentra la dimensión más profunda de la persona, la dimensión espiritual.

Animar y reconocer la gran labor de las familias. Como padres y primeros educadores, ustedes, hacen posible que sus hijos reciban la formación académica y humana que necesitan. Desde la educación constante de estos jóvenes, están contribuyendo a que nuestra sociedad sea un poco mejor. 

Y como no, en un día como hoy, agradecer a la Asociación de antiguos colegiales, y es que los años pasados, son los que han ido haciendo posible la larga historia de este Colegio y las vivencias de tantas personas, han dejado huella.

Trabajemos juntos, sin cansarnos, en equipo por los objetivos que soñamos… y será un curso que merezca la pena.

Quiero acabar con esta reflexión de Tomás Recart P.: “Nunca, pero nunca dejes que alguien se interponga entre tú y tus sueños. La voluntad firme, la disciplina y la persistencia, te llevarán si o si a lograr tus objetivos”. 

Muchas gracias