Acto académico de clausura del curso 2020-21
Con el acto académico de final de curso 2020-21 que tuvo lugar el 24 de abril se han dado por finalizadas las actividades de uno de los años más difíciles de los últimos años, pero, a la vez, lleno de frutos en el ámbito deportivo, formativo, cultural, académico y personal.
Ha sido un año en el que el Pío ha recuperado las glorias deportivas de antaño en la Ciudad Universitaria, coronándose con un segundo puesto en el campeonato de fútbol sala de la Asociación de Colegios Mayores, llegando a los certámenes finales del torneo de debate y tenis y recuperando el espíritu voluntario y la pasión por el teatro.
Tras un minuto de silencio por las víctimas de la pandemia, el director del Colegio Mayor, Pedro Sainz de Baranda, comenzó el acto con un emotivo discurso en el que recordó el esfuerzo realizado por todos los que estuvieron al frente de las necesidades del Mayor en este año tan duro y a los colegiales por un año tan participativo. “Si no fuera por vuestro entusiasmo y vuestra entrega, nada de lo que hemos hecho sería posible. Recordad que el Colegio lo hacen los colegiales”. “Tenemos una semilla que estaba dormida en lo más profundo de vuestra alma colegial y vosotros habéis empezado a sacarla”. “Hemos aprendido lo que es la victoria y que a veces se pierde, hemos aprendido lo que es el talento, hemos aprendido que Dios está en nuestra vida. Estamos sembrando y eso es importante”, les dijo.
Después de la presentación, el colegial Gonzalo Pérez, coordinador de régimen interno del CMU Pío XII, hizo balance de las actividades del curso, en el que se ha sacado adelante el equipo de debate, el grupo de teatro, el grupo de fe y solidaridad y en el que se han alcanzado grandes logros deportivos “en un Pío cada vez más unido”.
Emotiva entrega de becas colegiales
Cada año en la clausura de curso se hace entrega de las becas colegiales, no solo a las promociones que están en el ecuador de su estancia en el colegio, sino a aquellos cuyo trabajo se quiere reconocer o agradecer por determinados motivos. Este año especial se ha entregado la distinción de honor, en representación de todos los trabajadores esenciales, al capellán Pedro Sevo, que acompaña en la pastoral a los colegiales del Pío XII y a los enfermos del hospital de la Fundación Jiménez Díaz. En los momentos más duros de la pandemia, el padre Sevo ha sido consuelo y compañía para mucha gente que ha pasado la enfermedad o ha muerto sola. Su discurso de agradecimiento provocó la ovación de todos los presentes. “Una sociedad que no acepta a los que sufren y no es capaz de acompañar en el sufrimiento es una sociedad cruel. La pandemia nos ha enseñado no solo a ser solidarios, sino el valor de la empatía. Por eso, este reconocimiento es para todos los que han estado luchando”.
Otra de las personas distinguidas este año ha sido nuestro conserje Javier Arnau, más de 25 años dedicado al Colegio Mayor Pío XII. En su trabajo, Javier ha sido testigo del devenir de esta institución, acompañando y ayudando a los colegiales en sus necesidades del día a día. Su beca es el reconocimiento a la dedicación y al trabajo bien hecho.
Un homenaje a la cultura
El Colegio Mayor Pío XII quiso distinguir también a una figura emblemática del mundo de la cultura y la música, que tan dañada ha resultado en este año de pandemia y que tan buenos ratos ha dado a nuestro Mayor en este curso, con la presencia de numerosos artistas. Miguel Ángel Arenas, “Capi”, artista plástico y productor musical, creador de artistas como Mecano, Tequila o Alejandro Sanz, tras recoger la distinción colegial, recordó aquellos años de “La Movida” en los que la música y la cultura se convirtieron en símbolo de libertad y pluralidad. “Mi trabajo siempre ha sido una búsqueda del talento y la experiencia antes de que se produzca” en una juventud a la que “casi nunca se presta atención”.
Al finalizar, recordó el valor esencial del arte “que está siempre unido a los momentos especiales de nuestra vida”.
Tras la imposición de las becas a los colegiales de las promociones 2017 y 2018 tomó la palabra en representación de todos ellos Juan Tomás Ferrández. Sus palabras fueron de profundo agradecimiento para todo el personal del colegio y de la Fundación Pablo VI, para Juana González, la secretaria académica, “una de las personas que más dentro lleva el Mayor”; para el director Pedro Sainz de Baranda “por coger un barco tan grande y llevarlo a tan buen rumbo”, a mis padres “por darme la oportunidad de estar aquí” y a mis compañeros por hacer de esto una gran familia. “Mis padres me dieron la vida. El Pío ganas de vivirla”.
La última parte del encuentro fue la entrega de las distinciones de colegiales del año a Hugo García Las Heras, por su dedicación al mayor y su afán de cooperación; a Gabriel Lllull, delegado de oratoria y debate; y a Gonzalo Martínez, capitán del equipo de fútbol sala, a quien se ovacionó muy especialmente, junto al resto del equipo, por haber logrado llegar esa misma mañana a la final del torne de Colegios Mayores contra el Elías Ahúja.
El acto concluyó con el tradicional canto del Gaudeamus Igitur.