El diestro Fran Rivera en el Pío XII
Gabriel y Gonzalo, los delegados de conferencias del Pío XII fueron los encargados de presentar al diestro Fran Rivera, que tuvo la generosidad de acompañarnos el 16 de febrero en nuestro Colegio Mayor.
“El toro está sufriendo un ataque brutal y llegar, ver esta juventud y que le gusten los toros me hace muy afortunado”, fueron sus primeras palabras.
Y es que, en efecto, la sala Maritain, habitual para este tipo de conferencias de los colegiales, estuvo llena, dentro de las medidas sanitarias permitidas, para escuchar al empresario del toro, del que hay una gran afición en el Colegio.
Durante su charla con los colegiales, Francisco Rivera Ordóñez, contó historias de una familia de larga tradición taurina: la relación de su abuelo, Antonio Ordóñez, con Hemingway, su rivalidad con el diestro Luis Miguel en el mundo del toreo, su padre, etc…
Una tradición que le ha hecho convertir el toreo en su gran pasión, a la que ha dedicado gran parte de su vida. “Pensar que las corridas van a desaparecer me da una pena que me mata”, les dijo. Por eso, el futuro de este arte está en vosotros, en los jóvenes.
No obstante, el también empresario comprende que sea un espectáculo que a mucha gente no le guste “porque es el único en el que se muere en directo” y eso “no es fácil de asimilar”. Pero “es una belleza” y logras que la gente se emocione, aún asumiendo que el riesgo “forma parte de las corridas de toros”.
Tras el encuentro en el que, además, mostró algunos lances a los colegiales, firmó el capote del Colegio Mayor Pío XII.