Recta final de los exámenes parciales del primer cuatrimestre
Las salas de estudio y la biblioteca del Colegio Mayor Pío XI están llenas de colegiales que apuran las últimas horas antes de evaluarse de alguno de los exámenes de este primer cuatrimestre. La mayoría de los estudiantes terminan las pruebas a finales de enero. Toca hincar los codos en un último esfuerzo para lograr buenas calificaciones y poder empezar el próximo tramo de curso sin asignaturas pendientes. Algunos se lamentan porque han comenzado tarde a estudiar o la materia es más difícil de lo que creían. Otros están bastante relajados porque aseguran que estudian durante todo el año. Muchos piden ayuda a otros colegiales que ya han cursado alguna asignatura que no acaban de entender. “La verdad es que la atmósfera que hay aquí dentro es súper cómoda porque ves a todo el mundo estudiando y no te distraes ni tienes planes alternativos”, explica Juan Chazarra, que estudia cuarto curso de Farmacia en la Universidad Complutense. “Es el curso más difícil de todos”, asegura, algo nervioso ante la cercanía del examen de química que le queda pendiente, al que califica como “el más duro de la carrera”.
Para Eduardo Duarte también es una ventaja estudiar con otros compañeros del colegio. Estudia un doble grado en Economía y Actuariales en la Universidad Rey Juan Carlos. “El ambiente de estudio actúa como presión social, te ayuda a concentrarte”. Eduardo tiene buenas sensaciones de los exámenes que ha hecho hasta ahora. “Hay ciertas asignaturas que se han complicado bastante este cuatrimestre, pero creo que ha ido todo bien”. Pablo Hernández estudia Física en la Universidad Complutense y también se muestra relajado. “Estudio durante todo el año, somos pocos los que hacemos eso”, explica con una sonrisa. “Así que estos días de exámenes hago la misma rutina que siempre, tengo tiempo para todo”, asegura. Iván López estudio Derecho y Relaciones Internacionales en la Universidad Francisco de Vitoria. Para él, el momento más difícil es el previo al examen. “Puedes tener nervios porque no sabes lo que te va a entrar ni cómo te va a salir”, explica. “Aunque no queda otra que confiar en lo que has estudiado y tratar de hacerlo lo mejor posible”.
Los cuatro están de acuerdo en que una parte importante del tiempo de estudio es buscar momentos de desconexión en los que te puedas relajar. “Solemos bajar al gimnasio o jugar alguna pachanga de fútbol para soltarlo todo”, explica Eduardo. Otros de los momentos para desconectar son los desayunos, las comidas y las cenas en el comedor. Es la excusa para tener un rato de conversación con otros colegiales.
Al finalizar los exámenes, muchos estudiantes deciden premiarse por el esfuerzo y se van de viaje con sus compañeros. Es el caso de Iván y de Juan. “Nos vamos a esquiar a Formigal, así que estoy deseando acabar”, afirma Juan con una gran sonrisa.
Entre nuestros 130 universitarios hay carreras muy variadas, principalmente del ámbito de las Ciencias Sociales y la Ingeniería.
¡Desde aquí deseamos mucha suerte y ánimo a todos los Píos en la recta final de los exámenes!